Dependiendo del tipo de página web o blog personal que vayas a diseñar e instalar, una persona podría verse en la confusión de que tipo de plataforma utilizar para poder ofrecer sus servicios, sean estos un producto tangible o conocimientos que desee compartir en la web. Sin que sea una regla estricta sin variación alguna, podríamos mencionar que en el primer caso (un producto tangible) se podría llegar a usar a una plataforma basada en PrestaShop, situación que ha llevado al éxito a una gran cantidad de personas que se han iniciado con una tienda en línea y en donde, el éxito alcanzado es grande si se lo llega a manejar eficazmente con determinados trucos muy sencillos de seguir. En el segundo caso estaríamos haciendo referencia a una plataforma basada en WordPress, algo que no necesariamente tiene que ser intangible sino que más bien, debería ser analizado tanto por el propietario como por los colaboradores que formen parte de dicho entorno.

Asumiendo que nuestra necesidad se encuentra planteada en el segundo caso, entonces la adopción de una plataforma en WordPress para poder redactar información que sea útil a los demás se viene a la mente de todos; alguien que se esté iniciando en WordPress, con seguridad que habrá notado de la interfaz de esta herramienta (a la hora de empezar a redactar determinada información) nos muestra una sola fila de opciones, misma que es considerada por  sus desarrolladores, como las funciones primarias o más importantes para ser utilizadas por los redactores. No es la única que podemos encontrar, ya que si necesitamos funciones adicionales, las mismas aparecerán en una segunda fila siempre y cuando activemos a la casilla respectiva.

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Funciones primarias y secundarias para utilizar en WordPress

Si ya nos hemos ubicado en el entorno de redacción de WordPress (y por primera vez), entonces lograremos encontrar a la primera fila de opciones tal y como mencionamos anteriormente. En esta fila de opciones encontraremos alternativas que nos ayudarán a:

  • Negrita. Con esta función tendremos la posibilidad de resaltar en negrita una frase o palabra de importancia para que el lector la tome en cuenta por sobre las demás.
  • Itálica. Al igual que en Microsoft Word, podríamos utilizar a esta opción para colocar una palabra o una frase en un formato de itálica.
  • Texto tachado. Esta opción se la utiliza generalmente cuando deseamos corregir algún tipo de error luego de una publicación.
  • Sangrías. Aquí tenemos a dos tipos de sangrías, algo que es muy similar a cualquier suite ofimática que hayamos utilizado anteriormente. La primera nos ofrecerá una sangría con «.» mientras que la segunda, sangría numeradas.
  • Alineación. Aquí tendremos la posibilidad de colocar nuestro texto hacia la izquierda, derecha o quizá, centrar al mismo.
  • Vinculación. El primer icono con forma de cadena nos servirá para poder realizar enlaces internos o externos, mientras que el segundo para eliminar a dicho enlace si ya no lo queremos tener.
  • More. Este pequeño icono marca la separación entre lo que leera preliminarmente el visitante sobre el artículo. Al hacer clic en «more» se desplegará el resto de la información. Por lo general esta pequeña marca se la coloca luego del primer o segundo párrafo del artículo.
  • Pantalla completa. El icono que sigue al antes mencionado, nos posibilita activar la pantalla completa de la interfaz de WordPress, misma que se la utiliza cuando el redactor trabaja en ultra portátiles de pantalla pequeña.
  • Kitchen Sink. Esta opción desplegará a las funciones secundarias en una segunda fila de esta interfaz en WordPress.

Tal y como hemos descrito anteriormente, las funciones que hemos enumerado y que se encuentran ubicadas en la primera fila de la interfaz de redacción de WordPress son las más utilizadas por un redactor, lo cual no quiere decir que sean las únicas, ya que el último icono que hemos mencionado, llegará a mostrar a otras cuantas opciones más que son consideradas como secundarias y que pueden ser mostradas u ocultadas en cualquier instante. Una vez que hagamos clic en dicho icono, inmediatamente encontraremos a las siguientes funciones:

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  • Paragraph. Aquí se encuentran los diferentes tipos de formatos de textos, estando el de párrafos, título grande, título mediano, título pequeño entre otros más.
  • Subrayado. Si necesitas realizar un subrayado sobre una palabra o frase, este es el icono que deberás utilizar.
  • Color del texto. Aunque muy poco utilizado, WordPress lo ha colocado para quien requiera utilizar frases o palabras de distinto color. Al hacer clic en dicho icono se mostrará una paleta de colores.
  • Pegar desde texto plano. Nos servirá para poder importar un texto específico desde algún documento sin formato.
  • Pegar desde Word. Este icono en cambio nos servirá para importar contenido que hayamos redactado en Microsoft Word.
  • Remover un formato. Si hemos importado un documento con múltiples formatos, esta herramienta nos ayudará a eliminar a todos ellos.
  • Caracteres especiales. En el caso de que no conozcamos el código ASCII para colocar caracteres especiales, este icono nos ayudará a poder insertar a algunos de ellos.

Básicamente estos son los íconos de las funciones más importantes que podríamos estar utilizando en WordPress, mismas que tal y como hemos mencionado, se dividen en Principales en la primera fila y Secundarias en la segunda fila.

Ahora bien,  el hecho de haber  mostrado tanto a las funciones primarias como las secundarias no quiere decir que un redactor tenga que trabajar únicamente con una o algunas de ellas, sino que más bien, debería de intentar combinar a todas ellas inteligentemente y de forma eficaz; por ejemplo, un buen artículo debe constar de varios párrafos, títulos con la opción T2 del Paragraph, viñetas, negritas y otras cuantas opciones más. Estas últimas que hemos mencionado son muy importantes en un artículo bien redactado, ya que palabras o frases en negrita advierten al lector que está leyendo algo muy importante dentro de todo el contenido de la información propuesta. Lo recomendable es tratar de utilizar frases de hasta ocho  palabras en negrita y en cada párrafo,  ello con el objetivo de evitar una fatiga visual  que llegue a alejar al lector de lo que estamos intentando mostrar.